martes, 16 de octubre de 2007

¿Te acuerdas?

Se levantaba temprano, se vestía, cogía el bolso y la carpeta. Abría con llave porque aún no había salido nadie. Puntual, esperaba que llegase, observando el final de la calle para localizar el coche. Veía el intermitente de la izquierda y sabía que ya llegaba. La mayoría de veces aún era oscuro, pero eso no importaba. El día empezaba perfecto; siempre que empezaba de aquella manera.

Un viaje directo a la capital, sin encontrar tráfico, entrando a Barcelona por la ronda. Había veces que no hablaban, un bon dia, un beso... pero siempre la compañía. No le gustaba saber que ya llegaban al primer destino. Odiaba vivir tan cerca porque el viaje siempre se le hacía corto. Aparcar justo delante de un contendor, mirar al chófer de cada día y los primeros alumnos que iban para la universidad.

Que vagi bé. T'estimo. Per la nit et trucu.

Un segundo trayecto; sin compañía, caras desconocidas y el mismo conductor de siempre. Pero le encantaba empezar el día de aquella manera.

Pero mañana irá en transporte público. Ya no existen mañanas como aquellas, ya no existe...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

existen días diferentes,porque la vida cambia y muchas veces a mejor!
tienes a ito y tienes a pitu...

Anónimo dijo...

joer ja comensem mimadaaaaaaaaaaaaaa amb lo macu que era l'anterior, que em feia emocionar i ara amb aquet ens fiques tristos... els conductors que cambiin ja collons! i a somriure que em de viure pensan en el futur i no en els trajectes de fa un temps enrere!