miércoles, 26 de marzo de 2008

el día de.-

MIÉRCOLES 19 DE MARZO

Hoy es el día más nocivo para una infancia rota. Es regodearse en la miseria, anhelar lo imposible y demostrarnos que somos vulnerables ante la tan, por muchos, venerada vida. Nos enseña la crueldad con la que nos trata este mundo, pero sólo a algunos. Es un día dedicado a una sola figura, aunque muchos lo pasen por alto. Años atrás, yo tampoco le tenía cierta empatía a este día, pero es que no necesitaba un día concreto para demostrarte lo mucho que te quería, y que te sigo queriendo. Cuando era pequeña, sin embargo, me gustaba hacerte dibujos cutres y escribir, una y otra vez, para el mejor papá del mundo. Sé que son muchos los que escriben esta frase, pero la mía es totalmente sincera.

Pero, en los últimos años, he decidido que este día no se lo dedico a la figura paterna ya que todos los días son para ÉL. Hoy prefiero pensar en todas aquellas personas que tienen que soportar tal día como hoy; en todas aquellas personas que tienen que soportar escenas de padres e hijas que les rompen el corazón; en todas aquellas personas que tienen que soportar la ausencia más dura. Hoy pienso en mí y en todo lo que no he podido vivir. Repito, para mis adentros, la palabra papá. Pero algo ha ocurrido porque, cuando intento pronunciarla, me tiembla la voz.

Hace poco, sin embargo, he llorado como si de una niña se tratara. He vivido un día del padre en el seno de una familia. Las dos princesas llevaban días esperando este día, y hoy lo han celebrado por todo lo alto. He aguantado hasta que el todo ha podido conmigo y me he derrumbado. Entonces he oído cómo alguien subía las escaleras y se sentaba a mi lado. Consciente de todo lo que pasaba por mi cabeza en esos momentos, sólo me ha abrazado y me ha dicho que estaría orgulloso de mí. ¡Pero yo no quiero que esté orgulloso de mí! ¡Yo quiero que esté aquí, conmigo!

Por eso, desde hace años, el 19 de marzo perdió la fuerza paternal. Todos aquellos que me leen, déjenme que les de un consejo. Anulen el día 19 como el día de y hagan de cualquier día, vuestro día. Porque, créanme, no hay nada más duro que no poder vivir momentos y sólo valerte de lor recuerdos.

Dedicar un día de 365 es un gran error*

1 comentario:

Anónimo dijo...

la veritat es que jo sóc possiblement, un dels menys indicats en comentar aquest text... si ja a les altres persones tendeixo a no mostral-s'hi el que sento, als meus pares menos... així que desprès de llegir això, apart de tornar-te a posar pels núvols, em sento bastant capullo...




t'ho repetiré petit heroi: ets una reina!!!